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El pasado mes de febrero la Asociación Transformando Entre Mujeres de Alcalá iniciaba una campaña para habilitar puntos violeta permanentes en la localidad. Según un comunicado de la Asociación, el motivo de esta iniciativa fue «el incremento de los delitos sexuales y el repunte de la violencia de género que se vive en el país y en la localidad».
La campaña comenzó financiándose con las cuotas de las personas que pertenecían a la entidad y ha organizado un grupo de voluntarios y voluntarias. Se ha hecho un especial énfasis en los centros educativos de secundaria y locales de ocio nocturno, pero pertenecen a esta red establecimientos como asociaciones, comercios, cafeterías, clínicas…
Más de 70 establecimientos adheridos
«Los más de 70 establecimientos adheridos se distribuyen por toda Alcalá, ya que, para Transformando Entre Mujeres, es importante que cada barrio cuente con puntos violeta con el código QR para que la población pueda tener acceso directo e inmediato a la Guía de Actuación contra las Violencias Machistas y las Agresiones Sexuales del Ministerio de Igualdad», explican en una nota de prensa. Consideran que no solo puede suponer un recurso vital en determinadas circunstancias, sino que puede convertir a cada persona usuaria, en sí misma, en un punto violeta, sabiendo cómo actuar en el caso de que presencie o sufra agresiones.
La Asociación ha proporcionado una pegatina identificativa y un resumen de la guía para agilizar la intervención en caso de necesidad por parte de estos centros colaboradores, ofreciendo también la posibilidad de formación e impartir charlas. Se ha incorporado el protocolo preventivo «Pregunta por Ángela» y se ha realizado un mapa interactivo de puntos violeta en Alcalá disponible en el perfil de Facebook de Transformado Entre Mujeres.
La entidad considera un éxito la iniciativa por el número de puntos violeta alcanzado en un tiempo limitado. «Está claro que la ciudadanía y los establecimientos de Alcalá están comprometidos con la seguridad de sus vecinos y vecinas, hasta el punto de implicarse en la lucha contra el problema estructural que supone la violencia machista y por eso no han dudado en constituirse en puntos de cercanía y proximidad para la población con que hacerle frente», han concluido.