Más de 30 multas por mear en la calle en Nochevieja. Es el balance de la primera cacería al meón incívico. Tras las quejas públicas de vecinos indignados por las micciones en los portales de sus casas, la Policía Local se ha puesto manos a la obra y ha sancionado a varias decenas de personas por orinar en la vía pública. La incontinencia les va a salir cara, como apunta el amigo Romualdo en su columna. Pero me pregunto, ¿por qué la Policía multó en Nochevieja y no en Nochebuena? No hay que ser un lince para advertir que la presión social y mediática –permítanme que me apropie de la parte alícuota que nos pertenece– ha surtido efecto.
CONTENIDO EXCLUSIVO
Hazte socio. Si ya lo eres y aún no tienes claves pídelas a [email protected]
Si ya eres socio inicia sesión