Un responsable de la policía en Alcalá ha sido detenido por asuntos relacionados con el tráfico de droga. Me parece un asunto de gravedad. Cuando los que tienen que velar por nuestra seguridad forman parte de los malos, la tierra se mueve a nuestros pies. Consuela al menos saber que el sistema aún tiene la capacidad de protegerse a sí mismo, pero no hace falta mucha imaginación para calcular el alcance de la corrupción cuando ocurren situaciones de este tipo. La tentación del dinero fácil, el atajo de la ilegalidad, es en suma la constante en un país gangrenado por la corrupción.
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